Real Orden, La facilidad con que algunos Libreros de Madrid, y del Reyno por un deseo desordenado de lucro venden todo género de libros prohibidos, los que caen freqüentemente en manos de gente incauta, que no teniendo los principios suficientes para conocer, y separar la buena y mala moral, alhagados por la amenidad del estilo, beben la ponzoña que encierran, y luego la vomitan por el ansia de lucir en conversaciones públicas y privadas, y tal vez hasta en los actos literarios de las Universidades, Colegios, y demás Cuerpos, que solo deben enseñar a descubrir la verdad acia el Soberano... ha excitado el zelo de S.M. para ocurrir al remedio de estos daños, y es su Real voluntad se encargue a todas las Justicias de estos Reynos que recojan de los Libreros los libros prohibidos que tengan en su poder, no permitiendo en sus Tiendas disputas, ni conversaciones que toquen a subvertir nuestra constitución política
Publicación: (1798)